agosto 19, 2007

Vete al puente

He caminado demasiado y me he cansado. Me atrajo la idea de irme a un monasterio para apartarme de mi peregrina condición humana pero no tengo fuerzas para ser un monje aislado del mundo. El mundo me encierra en sus límites horrorosos. Transgredo sus espacios citadinos y comunes siendo un disidente del montaje cotidiano. Te busco. Me digo, vete al puente y cuando llego a la armazón de acero fundido que está suspendida como un gigante abstracto, soy libre.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Desde esas alturas uno querría volar. Ser al extremo y en la línea divisoria que nos separa del fin.


*

BQ está abierto, por siaca :)

Anónimo dijo...

Que salga el sol aunque no caliente, me trae por aquí, por contraste, a contemplar la foto del puente.
Y ¿cómo vas?

Ivana & Ivonne dijo...

Los pies se gastan, y una buena forma de alejarse es olvidando hablar y crear un metalenguaje. si, asi es.

tzarel dijo...

¡Di la vuelta a los días en cinco mundos!
=)
Soy un impenitente cansado.


*


Es lo que los "vanguardistas" de hoy plantean, ¡metalenguaje!. Está interesante, está chato, está oscuro, está turbio. No está.
El lenguaje como depósito de experimentos puede colapsar para nada.
Estoy cansado.

Anónimo dijo...

Vos y tus cosas.

tzarel dijo...

Sin duda en este cybermundo también hay de todo, como decir que los metacomentarios pueden ser nada.